Obra

Terra Incognita

Leyenda

2000 – 2002
Plomo, fibra de vidrio, resina y luz.
340 x 1000 x 1400 cm

Artista

Por

Texto

Cinco rocas impregnadas de luz.

Terra Incognita se presenta como una asamblea banal de piedras de plomo.

Alejadas de todo contexto humano, emocional o sentimental, las piedras aparecen como extrañas esculturas que forman una instalación abstracta.

Ignoradas por la naturaleza, las rocas son aquí nuevamente apreciadas en su individualidad; podemos examinarlas, escrutarlas, como si entrásemos en sus sueños, en los sueños de la roca que quiere existir, darse a conocer a un público mas amplio.

La rocas, elementos fundamentales de la tierra y del hombre, son como reliquias de un conjunto mayor y constituyen una llamada al temor de dejarse llevar por uno mismo. Son los emblemas de un misterio divino, la presencia de la materia que nos rodea. De manera unitaria.

Sin embargo, las rocas se aparecen simultáneamente como algo extraño y como objetos de otro planeta que revelan otra dimensión del hombre: la separación, la distancia y la alienación de los fragmentos. Deseamos colmar esas distancias y comunicar con la gente exterior. Mi reacción existe en el seno de esos polos afectivos, balanceándose lentamente de uno a otro, como una hamaca.
Esas rocas no son espectaculares, se afirman en su forma sólida, accesible, presentándose mas bien como una persona, lo que nos permiten identificarnos.

Al acercarse, sobre cada roca se puede ver una escena, unos figurines en plomo del mismo material que las rocas, creando un relato. Emerge de ellos una dimensión humana y política que concierne las condiciones de vida de los cultivadores de opio colombianos y sus luchas contra la vigilancia policial.

En la obra seleccionada previamente, las rocas constituyen una pantalla de proyección de ideas y fantasmas de la figura femenina; aquí, una inmensa escena donde se desarrolla la vida de los trabajadores anónimos que se ganan la vida ilegalmente. Es un contraste de emociones, un balance de ambivalencias entre la tentativa de trabajar y de mantener una familia, de vivir y de amar todo sosteniendo la droga y la violencia.

Las rocas son reales, pesadas, llenas de vida, pero vacías en su interior, fabricadas a partir del mismo material que los figurines de cultivadores – la misma substancia potente.

Cinco rocas impregnadas de vida.